Ningún detalle faltó en la boda de Ángeles y Manolo. Los novios, sabedores de que una boda, incluso para los invitados, supone un elevado nivel de estrés, intentaron facilitar la vida a todos los asistentes al evento y la celebración.
Una buena muestra de ello era la presencia de decenas de chanclas para chicas, para no tener que usar durante toda la ceremonia tacones, un tipo de calzado que puede llegar a hacer añicos la salud de los pies.
Esta boda en Sevilla, en Hacienda Vera Cruz, fue una boda civil, por lo tanto un evento que agrupaba a la celebración de la boda y el posterior banquete. Esto, para los invitados es siempre una buena noticia, pues no obliga a desplazarse hasta otro lugar.
¿Cómo hacer frente al calor en una boda?
Otra de las enseñanzas que nos deja la boda de Manolo y Ángeles en Hacienda Vera Cruz es cómo hacer frente a las altas temperaturas. Por suerte, las zonas ajardinadas de la hacienda ofrecen mucho espacio de sombra que ayuda a paliar en buena medida el calor y suaviza las temperaturas de todo el ambiente.
En la ceremonia civil, los asistentes pudieron disfrutar de una food truck para tomar unas sabrosas patatas fritas, y es que lo decimos, en esta boda en Sevilla no faltó de nada. El objetivo final era celebrar el amor y que todos los asistentes disfrutaran, y vaya si se consiguió.
En la recepción, al igual que durante la ceremonia, había colocadas numerosas carpas y toldos para aumentar ese espacio de sombra. Precisamente, en uno de esos espacios posaron Manolo y Ángeles junto a nuestra responsable.
En el menú de boda, y antes durante la recepción, todos los invitados degustaron las excelentes viandas de Catering Ángel de Utrera, uno de los más afamados y con mayor prestigio en la provincia de Sevilla.
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