Hacienda Vera Cruz y Catering Dávila: Boda de Ángel y Mari Cruz

Una vez más, en Hacienda Vera Cruz tuvimos la oportunidad de organizar el convite de celebración de una boda. En esta ocasión fueron Ángel y Mari Cruz los que confiaron en nosotros y disfrutaron junto a todos sus invitados de una noche que seguro que será inolvidable.

Bodas de verano, bodas nocturnas

El verano es una época magnífica para celebrar una boda nocturna, disfrutar de la recepción mientras atardece en los jardines de Hacienda Vera Cruz para después recrearse en nuestros salones acompañados del saber estar y la profesionalidad de Catering Dávila es todo un acierto.

Las bodas en Hacienda Vera Cruz cuentan también con ese aliciente de que, al no encontrarse la hacienda en pleno núcleo urbano, el calor sofocante veraniego es mucho más soportable, los invitados al enlace disfrutaron de la mano de nuestros profesionales y Catering Dávila de una jornada insuperable.

Detalles que marcan la diferencia

El mejor modo de satisfacer tanto a Ángel y Mari Cruz como a todos sus invitados es mostrar toda nuestra profesionalidad en el evento. Tanto Hacienda Vera Cruz como Catering Dávila nos comprometimos a ello y brindamos a los asistentes nuestro mejor servicio.

Los novios se fotografiaron junto con las tradicionales iniciales de sus letras y el símbolo &, junto a la puerta de la hacienda. La decoración elegida fue discreta, sencilla pero a la vez romántica, ya que las propias instalaciones de la hacienda lucen de manera magnífica.

En la recepción, destacaron la mesa con champaneras con la palabra Love justo delante y el tonel de vino con cervezas heladas junto a los cartuchos de papas fritas. Del salón hay poco que decir salvo destacar su impresionante aspecto.

Y llegó la noche

Tras el convite llegaba el tiempo de la fiesta. Los novios nos ofrecieron un baile nupcial espectacular, la temperatura ya había bajado unos grados y en particular los más jóvenes pudieron disfrutar de un servicio de barra libre a la altura del evento.