Carlos y Patricia confiaron en Hacienda Vera Cruz y en Catering Saboga para celebrar el banquete de su boda, nos eligieron a nosotros como compañeros de viaje en una jornada que, sin duda alguna, se convirtió en inolvidable tanto para los recién casados como para todos los invitados al evento.
Una boda nocturna que acabó siendo mágica
La boda tuvo lugar el pasado 1 de octubre, y aunque ya está entrado el otoño, todos sabemos que en Andalucía y en la provincia de Sevilla eso no es sinónimo de frío. Por fortuna, la noche del enlace de Carlos y Patricia la temperatura acompañaba y tanto en la recepción como en el banquete se podía disfrutar de una sensación térmica agradable.
El gran aliciente que tienen las bodas que se celebran al caer la tarde es que, si la jornada acompaña en el aspecto meteorológico, se puede contemplar un atardecer espectacular, que es el que con el que se regocijaron todos los invitados durante la recepción.
En la recepción, que tuvo lugar en uno de los patios de Hacienda Vera Cruz, los asistentes pudieron disfrutar de entrantes y aperitivos de primera calidad de mano de Catering Saboga y de una profesional venenciadora que servía vinos de Jerez a todo el que quisiera degustar de esos magníficos caldos.
Salón con tronío
Tras la recepción, el banquete tuvo lugar en nuestro salón principal, una magnífica estancia con amplios ventanales y techos de madera que lo convierten en un espacio único. Todos los comensales se deleitaron con un menú de primera
calidad propuesto por Catering Saboga y que hizo las delicias de muchos de ellos.
Fuegos artificiales para celebrar el amor
La noche finalizó con la tradicional fiesta tras el banquete, pero lo más novedoso de esta ceremonia fue el espectáculo de fuegos artificiales del que pudieron disfrutar todos los asistentes para conmemorar el amor entre Patricia y Carlos.
Hacienda Vera Cruz
Hacienda Vera Cruz y Catering Saboga en la boda de Carlos y Patricia