Dávila Catering en la boda de Vanesa y Jose María

El 12 de octubre, Día de la Fiesta Nacional y Día del Pilar, Vanesa y Jose María tenían algo más que celebrar que esto. Ese día fue el escogido por ellos para celebrar su boda y reunir en torno a este evento a todos sus familiares y amigos más cercanos.

Las bodas celebradas en viernes son menos comunes que las que ocurren en sábado, salvo cuando el calendario permite estas excepciones, que un día de fiesta caiga en viernes, lo que da pie a que muchas personas finalicen su jornada laboral en jueves.

Una boda civil y la compañía de Dávila Catering

Jose María y Vanesa optaron por una boda civil. El escenario, una vez más, fueron los jardines de Hacienda Vera Cruz, que lucían impecables gracias en parte a la buena meteorología, despejada y luminosa, que vivimos en esa jornada.

Tras la ceremonia, los invitados pasaron a la celebración, que comenzó como es costumbre con una amplia recepción. Los amigos de Dávila Catering lo prepararon todo para que los invitados estuvieran cómodos durante todo el día.

En la recepción, donde los invitados acostumbran a probar los primeros bocados y las primeras charlas, había habilitados varios bancos y taburetes, de modo que los asistentes podían descansar y dejar de estar de pie por algunos momentos.

Un banquete a la altura de Vanesa y Jose María, especialmente de este último, un joven muy alto y apuesto, que fue acompañado de una decoración plagada de flores y otros elementos vegetales, tanto en el salón como en la recepción y por supuesto en los jardines, durante la ceremonia.

Desde Hacienda Vera Cruz agradecemos a Vanesa y Jose María por facilitar en todo momento nuestro trabajo y por supuesto a Dávila Catering por compartir con nosotros momentos como el de la boda de estos dos jóvenes.