Magdalena y Pablo se dieron el sí quiero el pasado 30 de agosto. Tras meses de preparativos, los novios, y también sus familiares más cercanos, pudieron disfrutar de un día de fiesta y celebración en Hacienda Vera Cruz, con el buen saber hacer de Catering La Vega, que como acostumbra, ofreció a todos los invitados viandas de excelente calidad y sabor supremo.
Los novios optaron para su gran día convocar a sus invitados de noche, para hacer frente a las altas temperaturas. Todo el banquete tuvo lugar en el Salón Principal de Hacienda Vera Cruz, un espacio acondicionado para 400 personas que, gracias a sus grandes ventanas y el acceso directo hasta el patio, permitía ventilar todo el espacio y que los invitados pudieran salir a disfrutar de un poco de aire fresco.
Unos novios tremendamente felices
Pasados ya casi dos meses de la boda, Pablo y Magdalena todavía conservarán en su retina muchas de las imágenes de su boda. A Magdalena se le ve en las imágenes especialmente feliz, y Pablo acompañó en ese júbilo a su pareja, sobre todo cuando los invitados les jaleaban.
No faltó en la boda el toque solidario, pues en cada mesa aparecía un pequeño cuenco con una tarjeta de SPH Se Puede Hacer, una asociación solidaria dedicada a proyectos de ayuda social que realiza proyectos en todo el mundo relacionados con la educación, la sanidad, agricultura y medio ambiente y la integridad y ayuda a los colectivos más vulnerables.
En jornadas como las del pasado 30 de agosto, desde Hacienda Vera Cruz siempre trabajamos con esmero para que cada detalle responda a los deseos de los grandes protagonistas, Magdalena y Pablo. Catering La Vega, grandes colaboradores, hicieron lo propio. El resultado final es el que vemos en las imágenes, unos novios satisfechos y tremendamente felices.